miércoles, 2 de diciembre de 2009

Los ascensos en la Policía Nacional: etapa traumática, estresante , llena de lobbies y traficantes de humo.


No existe una etapa más traumática, estresante, llena de tensión , donde aparecen lobbistas y traficantes de humo, que la etapa de los ascensos, los cambios de colocación y las invitaciones o retiros.

Y justamente, el mes de diciembre toda la policía vive esta etapa.


Son tiempos nebulosos en donde todo está permitido, las reglas no son claras , transparentes y los ascensos se enrarecen , , principalmente, en los niveles más altos.

Prácticamente, desde octubre hasta diciembre, todo el trabajo se paraliza y baja la producción porque los policías están pendientes de los ascensos y de las invitaciones.

Esta tensión se acrecienta cuando salen publicadas las posibles listas de los generales que se van al retiro , muchos de ellos cuando recién empiezan a saborear el dulce o elixir del poder .

Este año ha sucedido un hecho interesante y a la vez, preocupante.

Por primera vez sale a la luz el malestar del personal facultativo de Sanida de la PNP.

Los oficiales del servicio en salud o “personal facultativo”, denunciaron las irregularidades en la evaluación de sus ascensos.

Señalaron que a diferencia de años anteriores , este examen no se hizo en base a un banco de preguntas , como sucede en las Fuerzas Armadas, sino a una extensa bibliografía.

El presidente del Frente de Defensa de Suboficiales de las Fuerzas Armadas y Policía Nacional, Raúl Soto Herrera, manifestó que este proceso había sido arbitrario porque se impusieron nuevas reglas de evaluación, ignorando el reclamo de los facultativos ante la modificación de la Directiva de Ascensos, que se inicio el pasado 23 marzo con el DS. N° 002-2009.

Soto demandó, a nombre del personal facultativo, la inmediata nulidad de esta evaluación, pidiendo que se tome en cuenta el cuadro de méritos, y que se les entregue un banco de preguntas como se hacía en años anteriores, tal como sucede en las FF AA.

Los médicos de sanidad de la PNP- que cada vez son menos porque el incentivo más poderoso que los mantiene en el servicio son los ascensos porque el sueldo es de hambre - se quejaron de que como el año pasado se dio un examen en base a un banco de preguntas, tal como lo hacen en las FF AA, 80% en base a un banco de preguntas y 20% con bibliografía; pero ahora cambiaron las reglas de juego para que el 100% sea con bibliografía.

Inclusive, médicos destacados, con 20 años de experiencia habían desaprobado el examen y los que nunca han figurado, obtuvieron un alto porcentaje.

En la especialidad de químicos farmacéuticos, de los 34 postulantes en el grado de mayor, el 100% había sido desaprobado. Los 16 postulantes en asistencia social también desaprobaron en todos los grados. En el caso de los médicos, los desaprobados sobrepasan el 50% y en algunos grados el 100%.

Esto es interesante porque por primera vez se escucha la voz discrepante de un sector discriminado de la PNP como es Sanidad .

El comando policial justificó los cambios en el mecanismo de evaluación señalando que con la anterior prueba el oficial estaba parametrado a memorizar la pregunta con la respuesta, sin mayor análisis. Sin embargo, se debe subrayar que se trata de personal que cumple con una labor especializada como en el caso de los facultativos de las FF AA que siguen usando el banco de preguntas. El general Zambrano , director de recursos humanos, también admitió que no se publicó el número de vacantes antes de la prueba, pero afirmó que así está normado en el cronograma de ascensos.

En los pasadisos de las principales unidades se sueltan bolas, rumores: te quedas, asciendes, te invitan, etcétera.

Esta etapa febril , tensa, no deja dormir a los coroneles , princiipalmente aquellos que están en salmuera para el ascenso.

Hasta la familia se contagia del estres, la tensión, siente los temores, las esperanzas .La esposa, los hijos, los suegros, el padre; todos, viven , gozan y padecen con el policía que se presenta al ascenso o cuyo nombre ha sido colocado en una lista apócrifa para ser invitado al retiro a fin de año.

Te quedas, asciendes. Se sueltan las bolas, rumores, se comenta en el INAEP quiénes se van, quienes se quedan, algunos saben hasta sus puntos débiles, tu puntaje, los cursos que te faltan, quiénes pueden ser los posibles candidatos para el ascenso al grado inmediato superior, quiénes están boceados , quiénes son los potenciales , se miran los rostros, tratan de descubrir sus secretos.

Los que están seguros se mantienen fríos, distantes, no entran al juego .

La mayoría sabe que no existen reglas escritas y todo vale : lobbys, arrastradas, chupaditas, etcétera.

¿Quiénes son los hombres claves cuya peso político puede ayudar para el ascenso?

Se empieza a buscar al padrino, al congresista, al secretario privado del presidente de la República. Todo vale.

Se generan lobbies, se piden prestamos para los regalos, las cenas, aparecen los “mecedores”, los traficantes de humo, los que dicen conocer a tal político, congresista, etcétera.

Los ministros del Interior, cada año, cambian las reglas de juego, todo obedece a una táctica calculada, mientras venden hacia fuera honestidad, transparencia, que este año todo será diferente, que se respetará la antigüedad, la capacidad, el talento, la “meritocracia” .

Esa palabra “meritocracia” se pone de moda por estos tiempos, pocos entienden que significa, pero suena bien.

El ministro dice que la meritocracia que impulsa el gobierno en el sector público es fundamental. No respetarla crearía malestar, disminuye la moral del policía y la institución se desprestigia.

Hernani lanzaba la propuesta de ascender a los mejores coroneles de la Policía y que se encuentren aptos para el ascenso para que ocupen los cargos en los cuales tengan que administrar recursos del Estado como combustible, alimentos. Quería asegurar que los futuros generales no metan la uña en estas áreas sensibles y para ello, debía revisarse su trayectoria profesional , que sea limpia.

El actual ministro del Interior, Octavio Salazar, en su época de director general , expresó que el ascenso de los suboficiales que aspiren a ser técnicos de la Policía Nacional del Perú (PNP) no se iba a basar sólo en la antigüedad del servicio y la experiencia acumulada, como venía ocurriendo, sino por méritos y conocimientos actualizados, y para ello se creará una Escuela de Capacitación a la que deberán postular necesariamente y aprobar los cursos de especialización que correspondan.

También manifestó que era necesario implantar la meritocracia en todo nivel del personal policial y que todos los que egresen de la Escuela de Suboficiales y deseen ascender al nivel de Técnico deberán ingresar a esta Escuela de Capacitación, aprobar los cursos y estar aptos para lograr el ascenso.

Explicó a la prensa que este requisito se enmarca en el nuevo Plan de Modernización de la Policía Nacional, en la nueva Ley de Ascensos y la nueva estructura organizativa de la PNP y que con ésta y otras medidas se está instituyendo la competitividad al interior de la Policía Nacional del Perú para continuar mejorando su labor de servicio al país y la sociedad.

Pero en la realidad, existen muchos suboficiales que también se han convertido en consumados lobbystas porque la reglas no son claras y transparentes en este nivel .

Pero al final , todas no pasan de ser medidas demagógicas, populistas .

Se juega con la fantasía de los policías porque la verdad suele ser dura y desagradable : como no existen reglas claras en los ascensos o un plan de carrera que se respete , hace tiempo que los ascensos a general , un ascenso netamente “político”, de “confianza”, escapó al poder discrecional del comando policial o del ministro del Interior ; todo se orquesta o se digita desde el Palacio del Gobierno y el margen que le dejan al director general de la PNP y al ministro , son muy pequeños .
Esto también les causa traumas, estrés, insomnios al ministro y al director general porque ellos también quieren quedar bien con su ex institución ( la Guardia Republicana), tienen sus “corazoncitos”, quieren quedar bien con los compadres, los entrañables amigos, con algunas ONGs que patrocinan y apoyan el ascenso de algunos coroneles, con los congresistas que tienen sus candidatos, con la familia, etcétera . Todo un cambalache .

De lo que podemos estar seguro – ya no existe dudas porque así lo dijo un ex ministro del Interior cuando le preguntaron sobre los ascensos a generales en la policía, creo que fue Gino Costa : los ascensos a generales son políticos . Y trazó un línea.

Es cierto, es una verdad de Perogrullo, así no quieran aceptarlo, el ascenso al grado de general es “político”, está teñido de política, suda política, dicen que es un grado de confianza,.

Si esto es así, entonces ascienden los coroneles que gozan de la simpatía del Gobierno, que tienen buenos padrinos, que logran llegar al [poder detrás del trono [ a la cúpula aprista, al secretario privado del presidente de la República, al presidente del Congreso, al empresario que es amigo de algún político, a las ONGs que promocionan algunos ascensos para generales porque quieren "información" o buenos contactos con oficiales en áreas estratégicas.

¿Quiénes son esos coroneles afortunados que cuentan con este apoyo “político”?

Nadie sabe, aunque todos lo sospechan.

Estos coroneles son una tumba, mantienen en secreto estos contactos, no dicen nada, escuchan, van a las reuniones, felicitan a los prospectos, celebran con ellos, los felicitan, les dicen que ya es un hecho, que están en la lista, que nadie los moverá- tal vez sea así- .

Pero en los días previos al Año Nuevo, entre gallos y medianoches, dan el golpe , se borraron las listas y aparecen los ascendidos de último momento.

Siempre se espera la última hora, el último minuto, porque el pan se puede quemar en la puerta del horno.

Eso lo saben los coroneles, nadie puede estar seguro de ascender hasta el último momento, cuando llega el 1 de enero del año próximo.

Como el ascenso a general es “político”, no está sujeto a ninguna regla de juego, y ex profesamente no se ha establecido normas.

Todo se deja al azar , no existe concurso , no hay cuadro de mérito, todo se hace a dedo , por selección .

Dicen que prima la "dedocracia" antes que la meritocracia y que por eso , el comando policial está lleno de generales que deberían regresar al curso de capitanes a refrescar sus conocimientos y recibir pastillas de " desahuevinas".

En estas etapa, como el grado de general es político y no existe reglas claras, muchos coroneles que pretende llegar a ser general , la máxima aspiración de un policía, la cima del poder , debe n fortalecer sus rodillas o convertirse en un experto lobbysta , más efectivo que el mismísimo Rómulo León, de paso, sacar sus ahorros o prestarse un capital , no tan pequeño, para los regalos, las cenas o los compromisos que requiere el oficio de lobbysta .

Para llegar al grado de general se camina por un sendero pedregoso, lleno de espina en donde las traiciones y deslealtades está en cada esquina .

Si a un coronel le dicen que para su ascenso a general debe matar, lo hace. Traiciona a sus amigos, promociones, le clava el puñal.

¿Por qué tanto interés en este grado?

Este grado te permite administrar los recursos de la institución. Si tienes suerte y amigos en el comando policial o el ministerio , puedes llegar al suministro de combustible o de alimentos. Y, de pronto, del departamento en donde habías vivido gran parte de tu vida como oficial, te trasladas a vivir a una lujos y confortable vivienda de dos pisos en Casuarinas,

La Molina , Salamanca . Pero, para cubrir las apariencias de vez en cuando bajas al apartamento. El Chalet se guarda bajo hermetismo.

Hasta coronel puedes ascender por tus propios méritos; más allá, es cuestión de suerte, oportunidad o compadrazgo, porque todos los años se cambian las reglas de juego para el ascenso.

La razón de este cambalache en los ascensos es que no existe un plan de carrera que y realmente nadie quiere elaborarlo porque no conviene a los intereses .

Al no existir un plan de carrera se asciende por concurso hasta coronel pasando a ser los ascensos en la PNP , principalmente en los más altos grados, un proceso injusto , discriminatorio , abusivo , en donde todo se permite , los lobbys y el tráfico de influencias .

Normas y procedimientos para los ascensos existen y en demasía . Tal es así que todos los años se cambian las reglas de juego para los ascensos hasta coronel .

La lista es interminable en canto a decretos supremos que han modificado el reglamento de ascensos .

El Decreto Supremo Nº 022-89-IN del 14 de agosto 1989 aprueba el Reglamento de Ascenso para Oficiales de la Policía Nacional del Perú, a su vez, fue modificado por el DS N°. 044-90-IN del 16 de noviembre 90.

El DS N°° 003-91-IN de 28 de .1991, el DS N° 007-2002-IN de 27 de mayo del 2002, el DS N° 004-2003-IN de 21 de julio 2003, el DS N° 011-2003-IN de 30 de setiembre 2003, el DS N° 016-2003-IN de 15 de diciembre 2003, el DS. Nº 005-2005-IN del 03 de Setiembre 2005.

La Ley N° 28857 , del 27 de agosto 2006, establece de que a partir del 1 de enero de 2007 quedan derogadas todas las disposiciones contenidas en el Decreto Supremo Nº 022-89-IN y sus modificatorias.

La Cuarta Disposición Complementaria Final de la Ley Nº 28857 establece la elaboración de dos cuadros de méritos , una de alta nota y otro de antigüedad que fue considerado toda una novedad en el sistema de ascensos de Oficiales , pero no garantizan la transparencia ni claridad en cuanto a los ascensos .

Luego , el D.S. N° 010-2008-IN , publicado el 31 de diciembre 2008 , aprobó el reglamento de ascensos para el personal policial .

El reglamento de ascensos ha sido cortado, mutilado, parchado, remozado, siempre con un criterio que obedezca a los intereses del comando policial de turno o del ministro del Interior , causando daño letal a las expectativas de los oficiales que después de este proceso, quedan golpeados , moral y psicológicamente .

¿Qué hacer?

No existe una solución más efectiva que la transparencia y establecer reglas precisas, en cuanto a los ascenso e invitaciones para acabar de una vez por todo con los lobbies y los traficantes de influencias por parte de políticos, empresarios, ONGs, congresistas, etcétera.

Estas medidas pueden ayudar:

1. Colocar un gran panel electrónico en el hall principal del Ministerio del Interior, con conexión a la página web de la PNP , para que todos los policías conozcan sus puntajes de manera abierta, franca , transparente .

2. Proceder a las invitaciones por promociones , como se realizan en las fuerzas armadas, y elaborar de una vez por todas el plan de carrera del policía .

3. Quitarte el tinte político al ascenso de general .

Si estas medidas la adopta el actual ministro del Interior, Octavio Salazar, pasará a la historia o sería un paso hacia el patíbulo.

Fuente: EL PACIFICADOR2008

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